CROZIER, Michel

La transición del paradigma burocrático a una cultura de gestión pública - Caracas : CLAD, Enero 1997

Se examinan los problemas planteados por la transición desde un paradigma burocrático hacia una cultura gerencial en la administración pública. Se plantea la necesidad de diseñar una adecuada estrategia para el cambio, que tome en consideración la prioridad del conocimiento, la preparación de las decisiones, la evaluación de los resultados y la formación del recurso humano. El aumento de las actividades administrativas tanto públicas como privadas, junto con la modificación de las relaciones de poder en la sociedad contemporánea, han llevado a la necesidad de adoptar una nueva forma de cultura gerencial que sustituya el paradigma burocrático. El problema fundamental de la transición reside en cómo superar las contradicciones existentes entre el desarrollo de capacidades para manejar la complejidad creciente y la escasez de recursos disponibles para lograr este propósito. En estas condiciones, la transición constituye un largo y doloroso proceso en el cual se tienen que cambiar no sólo las técnicas que han prevalecido en la administración, sino el sistema cultural en su totalidad. Esta tarea es más fácil de realizar en el sector privado, porque aquí las relaciones entre las acciones y los resultados son más directas que en el sector público, donde intervienen factores de distinta naturaleza. La elaboración de una adecuada estrategia para el cambio es un prerrequisito indispensable para tener éxito en la transición hacia una nueva cultura gerencial en el sector público. El conocimiento es un elemento clave para la transformación del sistema administrativo. En consecuencia, la inversión en el conocimiento de cómo funcionan los sistemas humanos es ineludible para diseñar la estrategia requerida para concretar el cambio. Además de la inversión en conocimiento, el esfuerzo debe orientarse en tres direcciones básicas: la preparación de las decisiones, la evaluación de sus resultados, y el entrenamiento de los operadores y de los líderes de las instituciones. El proceso decisorio en lo referente a la reforma administrativa no puede seguir llevándose a cabo en términos de aficionados, sino que debe profesionalizarse para garantizar la eficiencia del mismo y la optimización de sus productos. La evaluación de los resultados de las decisiones tomadas es uno de los instrumentos más importantes para promover el cambio de un paradigma burocrático hacia una cultura de gerencia pública. Se trata de una forma muy adecuada para que los involucrados en el proceso tomen conciencia de la pertinencia y de la validez de los cambios que se realizan, de modo que adopten posiciones más activas en favor de las transformaciones. El entrenamiento es un procedimiento que contribuye de manera significativa para que la gente se adapte al cambio cultural. Los programas de entrenamiento deben ser específicos para cada situación, de modo de capacitar a los funcionarios y líderes de las organizaciones públicas para solucionar los problemas que se presentan en sus entornos particulares. Se concluye señalando la existencia de una convergencia entre una estrategia apropiada, la posesión de conocimiento acerca de determinados problemas, y la presencia de individuos entrenados para resolverlos.